El Cluster Industrial Agroalimentario, creado por la Federación Agraria Argentina y la Cámara de Industriales Metalúrgicos de Córdoba, recibió el Premio Día de la Industria que otorga el Gobierno de Córdoba a los desarrollos industriales más destacados del año.
El premio, en la categoría "Grupo Asociativo para el Desarrollo Industrial" fue otorgado por el desarrollo de una jaula semiautomática para gallinas ponedoras para la producción de huevo a escala apta para pequeños productores.
Dificultad y oportunidad
Según informó la entidad federada, este desarrollo permite al pequeño productor de maíz –que hoy debe resignar un porcentaje importante de su renta en concepto de costo de flete al puerto– integrar localmente su producción, convertir proteína vegetal en proteína animal y de este modo incrementar la rentabilidad de su producción. Recordamos que un porcentaje importante del maíz cordobés viaja a otras provincias y regresa a Córdoba convertido en carne de pollo o huevo para atender una demanda insatisfecha localmente.
Al alcance del pequeño productor
Este desarrollo pone al alcance del pequeño productor del interior cordobés el mismo estándar tecnológico del que disponen los grandes productores de huevo y sustituye jaulas que hoy son importadas de Brasil o de Estados Unidos, se indicó.
La jaula, que puede ser atendida por la familia del productor, está disponible en versiones trifásica y monofásica y con protectores ante variaciones de tensión, para que, conociendo las deficiencias de la electrificación rural, esté al alcance de productores en los lugares más remotos de la provincia.
El objetivo es facilitar el acceso del pequeño productor a tecnologías de punta que contribuyan a mejorar su desempeño.
Asociativismo y competitividad
El Cluster Industrial Agroalimentario, fundado por Federación Agraria Argentina, la Cámara de industriales Metalúrgicos y la Cámara de Biocombustibles de Córdoba y al que se sumaron el Inta, el Inti y las universidades nacionales radicadas en la provincia, fue creado con el objetivo de fomentar el asociativismo y la competitividad intersectorial para el agregado de valor a las materias primas agropecuarias y facilitar el acceso a equipos de procesos y la transferencia de tecnologías a los pequeños y medianos productores.
"El gremialismo reivindicativo también puede ser propositivo", destacó la FAA.